Contrariamente a lo que cualquier persona carente de crossdressina podría pensar, las crossdressers homosexuales integran llamativamente una minoría; coexistiendo entre la mayoría, las chicas cross heteros y las bisexuales.
¿Raro esto? No tanto...
Muchas de ellas se han casado para alejar los prejuicios, mientras que otras lo han hecho para mantener al crossdressing sumido en la marginalidad de lo oculto (aunque siempre latente)
Abriendo estas puertas se introducen en la bisexualidad, casi sin darse cuenta...
Digamos que no les queda otra más que mantener oculto "este pasaje de sus vidas", ya que una esposa (sobre todo aquellas englobadas en lo convencional) son muy difíciles de persuadir con el crossdressing. Les sobrevuela la cabeza la idea de estar perdiendo a "su hombre", ahora convertido en mujer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario