Les voy a contar mi historia en la cual probablemente muchos o varios que lean este artículo podrán identificarse.
Yo
soy un hombre comun y corriente, mi vida transcurre normalmente, pero a
que llamamos normalmente, bueno a que tengo mi novia vivo con ella y lo
más probable es que próximamente nos casemos, tenemos nuestros amigos
con los cuales convivimos en eventos sociales, los cuales no saben nada
sobre mi parte femenina, únicamente la que sabe es mi pareja la cual ha
hido entendiendo y asimilando poco a poco el porque a mi me gusta
sentirme de vez en cuando toda una mujer.
Todo comenzó cuando yo
tenía aproximadamente (y digo aproximadamente debido a que no recuerdo
con exactitud el acontecimiento que les voy a describir a continuación) 9
años de edad, soy el único barón de 4 hermanos, es decir, tengo dos
hermanas más grandes y una más pequeña, mi madre siempre se ocupó del
hogar y mi padre viajaba mucho por su profesión. En una ocación jugando
con la hermana que es un año más grande que yo estabamos sacando las
medias y tobimedias que mi madre guardaba en su tocador, mi hermana me
dijo anda ponte esta tobimedia ( cabe señalar que yo en ese entonces y
hasta ese momento mi vida había transcurrido como cualquier niño, una
infancia normal) a lo cual yo accedí, al principio no sentí nada, me
puse la otra tobimedia en el otro pie, al frotar los dos pies fue donde
se despertó en mi una sensación (he de confesar que fue agradable) que
se mantuvo latente hasta que llegué a la pubertad (Dicho acontecimiento
lo recuerdo perfectamente debido a la sensación que me produjo).
A
la edad de 15 o 16 años cuando experimenté mi primera eyaculación (he
de confesar que nunca fuí un niño precoz a diferencia de la demás gente)
lo primero que se me ocurrió utilizar fueron unas pantimedias de una
tía, sabía que me iba a quedar solo y aproveché el ponérmelas,
recordando mi experiencia a los 9 años, fue la experiencia más increible
que había sentido en toda mi vida hasta ese momento. A partir de ese
momento en adelante cada vez que quería masturbarme siempre buscaba la
manera de hacérlo con una pantimedias puestas. Como ustedes bien saben
uno siempre llega a un punto en que el artículo que uno pueda utilizar,
se vuelve monótono y tratamos de buscar siempre algo diferente o nuevo.
Mi mente empezó a querer buscar más artículos de mujer sin dejar de
utilizar las pantimedias, fue así como paulatinamente llegué a
travestirme totalmente buscando crear en el espejo la mujer erótica que
todo hombre con inclinaciones heterosexuales siempre quisiera tener, eso
por un lado, por otro lado cuando encontré en el espejo a esa mujer fue
como una segunda magia que me hizo sentir dentro de mi la sensualidad
que una mujer emite cuando se arregla de una manera erótica y sensual.
También
fui descubriendo que al yo dejarme llevar por lo que Andrea siente, es
decir, entrar en el personaje de una mujer sensual, mi imaginación
comienza ha hacerme sentir que en realidad soy una mujer ( es algo
difícil de explicar hacia el género opuesto, estoy seguro que si un
hombre común y corriente, es decir, heterosexual, comenzara a
experimentar el vestirse de mujer, con algún artículo femenino, por
instinto y por evolución, siempre va a buscar algo nuevo y terminará
travistiéndose totalmente y entendiendo lo que estoy explicando).
Probablemente algunos dirán, "Yo ni borracho" ni que fuera Gay, creo que
esto no tiene nada que ver con la preferencia sexual sino con la
admiración hacia el género femenino, uno llega a admirar el género
femenino a tal grado que se convierte en una droga social y uno siempre
busca más y más.
He llegado a la conclución que este gusto es
como una adicción social (bueno así es como yo lo he llegado a definir),
no causa un mal físico, al contrario uno siempre busca verse mejor cada
vez, por ende uno trata de cuidarse y hacer deporte, a diferencia de
una adicción a las drogas. Pero por otro lado causa un mál en la
convivencia social ( que en realidad no debería de ser, simple y
sencillamente es un gusto), el cual al ser un tabú en nuestra sociedad
es rechazado y visto como una perversión y algo malo.
Es más,
uno debe de darse el gusto de hacérlo ya que también es una forma de
sacar el estrés que en ocaciones nos puede causar algún mál físico, como
algún mál cardiaco.
Siguiendo con mi historia al yo haber
sentido una segunda magia y haber descubierto a la mujer que llevo
dentro continué travistiéndome dentro del closet. En realidad esto me
causó muchos conflictos psicológicos, ya que en un principio estaba
confundido, me preguntaba si yo era Gay (pero a mi siempre me han
atraído las mujeres), si era un extraterrestre, hasta que un día en una
navidad mi hermana descubrió unos artículos femeninos, toda esa noche no
pude dormir pensando en qué es lo que me va a decir, si yo tenía que
abrirme con ella, estaba aterrado. Al final dejé que todo transcurriera
sin decir una sola palabra. En año nuevo mi hermana se me acercó y me
interrogó acerca de lo que había encontrado en mi cuarto, yo le contesté
que lo utilizaba para masturbarme. Antes de este suceso, yo ya había
ido a ver 3 psicólogos pero a ninguno le había contado nada, no fue sino
hasta después del suceso decidí contáselo al último psicologo que
visité. Al principio le decía que quería que se me quitara esto que me
causaba mucho conflicto, al final acepté totalmente mi satisfacción y
gusto por el travestismo, ella me recomendó buscar algo en internét lo
cual nunca se me había ocurrido y lo hice. Encontré un grupo llamado
Crisálida el cual decía, " Travesti Heterosexual" quedé muy impresionado
y a la vez aliviado y tomé la decisión de formar parte del grupo.
Primero
me hicieron una entrevista psicológica para ver si cumplía con el
perfil para poder entrar al grupo, al ver que encajaba perfectamente con
el perfil, fuí aceptado. El primero día estaba muy emocionado y a la
vez asustado ya que iba a tocar en una casa teniendo que dar una
contraseña ( sentí miedo pensando en que iba a entrar a un antro de mala
muerte), cual fue mi sorpresa el encontrar personas con un patrón de
vida y de experiencia muy similar al mío, fue hasta entonces cuando mi
estrés, mis inseguridades, mi timidez y mis miedos desaparecieron y
surgió un hombre que yo no conocía y que siempre manejé en la intimidad
de mi hogar. Un hombre que siempre quise sacar desde que era adolecente
pero que mis miedos no me dejaban sacar. Mi vida cambió 360 grados,
me volví en una persona mucho más segura de mi misma más agusto y
conforme con quien yo era, fue tal el cambio que en realidad Andrea fue
mi salvación no mi perdición como yo pensaba que iba a ser.
En
esta nueva etapa uno de mis principales miedos y a la vez emociones era
salir a la calle, exponerme, lo cual hice, fue una experiencia
inolvidable así como emocionante. De aquí en adelante ya no fue
suficiente el simplemente vestirme y verme en un espejo, también
descubrí que me veía bien y que era admirada ( siento que si no hubiera
sido admirada, no hubiera continuado). Al principio no aceptaba los
piropos tanto de hombres como de travestis, pensaba que solo querian
burlarse, pero paulatinamente descubrí que a cualquier lado que iba
recibía los mismos piropos, llegué a la conclusión que en realidad si me
veía bien (y de hecho a mi si me gustaba lo que veía en el espejo, para
mi eso era suficiente).
Uno llega a tal grado que el vestirse, y
salir ya no es suficiente, como les había comentado uno siempre busca
algo nuevo, evolucionar para sentir lo que uno sentía al principio (
esta evolución, si así se le puede llamar, realmente asusta porque uno
no sabe hasta que límite va a llegar), muy en el interior uno quisiera
tener el cuerpo de mujer (me atrevo a decir que si las situaciones en
nuestra sociedad fueran distintas, me transformaría en una mujer), sin
embargo, mi parte masculina la disfruto, podría decir que en un 70 u 80%
y que Andrea puede llegar a ser un 30 a 40%.
Esta evolución o
cambio el cual uno siempre anda buscando me llevaron a tratar de
experimentar alguna relación homosexual que en realidad yo lo
consideraría como heterosexual
ya que al meterme en el papel de una
mujer sensual y sentir el personaje en realidad soy una mujer aunque sea
por unos instantes, por tal motivo comencé a buscar el ser tratada como
una mujer, que me invitaran un trago, que me sacaran a bailar, y por
último que me llevaran a un hotel y sentir lo que probablemente siente
una mujer ( ojo uno nunca va a sentir lo que siente una verdadera mujer,
esto me queda más que claro, es solo una experimentación), hasta la
fecha no he llegado a experimentar en su totalidad todo el ritual
femenino. Siento que probablemente nunca lo llegue a vivir, ya que uno
mismo se bloquéa debido a que uno no puede darse el lujo de dejarse
llevar (el dejarme llevar significaría que probablemente me llegue a
gustar, y el que me llegue a gustar significa que me podría catalogar
como bisexual, me atrevería a afirmar que probablemente tengo una
bisexualidad reprimida) la verdad es que no lo se.
Porqué digo
que probablemente nunca lo llegue a vivir, porque actualmente tengo
novia, la quiero mucho y sabe de Andrea podria decir que hasta un 90%.
Esto que acabo de confesar no lo sabe aún, en realidad quisiera que ella
también fuera un poco más abierta y se atreviera también a experimentar
su parte homosexual pero por su educación, por su forma de ser y por
su carácter se que siempre lo va a rechasar. Me acepta porque se lo
conté desde un principio porque se lo he ido explicando poco a poco y la
he llevado a algunos eventos que se hacen, pero en realidad ni yo mismo
se hasta donde voy a llegar.
A estas alturas me atrevería a
decir que en realidad no debieran de existir los títulos que se les
ponen a las preferencias sexuales, yo más bien las definiría como
experiencias sexuales. Yo actualmente me considero heterosexual, adoro
hacer el amor con mi novia sin embargo, aún no descarto la posibilidad
de dejarme llevar por el ritual que conlleva el cortejo hacia la mujer, y
experimentarlo sin remordimientos y sin miedos y culpas.
Una de mis principales barreras y que se que no voy a cruzar es por mi familia y mis ganas de tener una familia
A
la conclusión que puedo llegar con todo esto es que el travestismo para
mi es una droga social que aun no ha sido legalizada ni aceptada dentro
de nuestra sociedad. Somos un ser curioso por naturaleza, sin embargo
lleno de culpas, miedos, y tabues. He llegado a conocer a personas tan
extraordinarias que ni yo mismo me hubiera imaginado, sin embargo,
algunas de ellas encerradas en sus culpas, otras protagonistas. Pero a
final de cuentas he llegado a conocer a las personas tal y como
realmente son (comprendiento el porque son como son) sin secretos, sin
miedos, sin nada que ocultar y por sobre todo aceptándolas tal y como
son porque a final de cuentas nos guste o no TODOS y enfatizo esta
palabra TOOODOOOS, tenemos alguna cola que nos pisen algunos se habren
totalemte (MIS RESPETOS) otras a medias (también porque no MIS
RESPETOS), pero los que aun no se aceptan totalmente y siguen luchando
con sus culpas, miedos y tabues, los invito a que se dejen llevar se
quiten las cadenas que los aprisionan y disfruten.
Eso si sin ejercer ningun tipo de daño tanto físico ni psicológico a nadie, ante todo el respeto al prójimo.
Muchas gracias
Andréa Shefler
http://andreashefler.blogspot.mx/
No hay comentarios:
Publicar un comentario