(Blog original de Terri Lee Ryan)
Los travestis y sus mujeres siguen teniendo problemas en su matrimonio en su intento de lograr un equilibrio en su relación. Algunos travestis sugieren que sus mujeres son lesbianas como un medio para justificar su propio papel de mujer en su matrimonio. Sin embargo, este es un camino peligroso a tomar para las parejas si quieren salvar su relación.
Los maridos travestis realmente quieren que sus esposas sean lesbianas? ¿Cómo se sentirían si su amada esposa se fuera con otra mujer ? No demasiado feliz, me imagino.
En primer lugar, no creo que la mayoría de los hombres cuando finalmente admiten a sus esposas que son travestis con un lado femenino, realmente quieren que sus esposas sean lesbianas. Los travestis son en su mayoría heterosexuales y casado con una mujer heterosexual. La unión fue de amor entre un hombre y una mujer hetero.
Sin embargo, he oído de un número de esposas que su marido, una vez que habian "salido del closet", han sugerido que tal vez ella es lesbiana. Esto es confuso para las esposas que llevan años con su marido siendo su amante femenina, la crianza de sus hijos y construir una vida juntos. Es egoísta y devastador escuchar esto de tu pareja.
Mi ex marido después de su preparación en su modo femenino varias veces durante nuestra fase de maratón martini, me dijo: "Así que te gustan las mujeres, ¿verdad? Eres una lesbiana, ¿verdad? "Me quedé de piedra, al hacer esta afirmación salvaje, yo nunca le di una indicación de que prefería las mujeres. Obviamente, si lo hacía, no estaría casado con él. Sin embargo, de alguna manera el que me gusten las mujeres haría su travestismo más aceptable. Yo era la que tenía que cambiar mi comportamiento y abrazarlo como una mujer.
Al principio pensé que era la bebida y hablar de jugar junto con lo que creía era un juego sexual inofensivo. Yo estaba lista para el reto y que tal vez esta era una manera para que incorporemos su travestismo en nuestra vida sexual. Al ser romántico, este papel que jugaba me sentía extraña, sin embargo, yo quería a mi marido y quería hacer que se sientiera cómodo en su papel de mujer. Cuando se vistía, me hice más su amiga que su amante o esposa heterosexual. En realidad le gustaba cuando me convertía en la dominante, ya que estaba a favor de ser el dominado.
Después de un número de veces haciendo esto, me sentí como si hubiera perdido mi propia feminidad, ya que no estaba obteniendo nada de esto. Mi ex marido estaba teniendo un gran momento. Me sentía muy mal y encontró consuelo en beber jarras de martinis. Me sentía como un objeto sexual, que hizo de mi marido travesti aún más desagradable porque había perdido el respeto hacia mí misma.
Me preguntaba quién era y lo que era el papel que ahora tenía en la vida de mi marido. Como ya no estaba permitiendo que este juego progrese, estaba atrapada en una red que no sabía cómo salir de ella. Mi marido realmente pensó que estaba en este juego, que resultó no ser un juego en absoluto, sino más bien un cambio en nuestra relación heterosexual a una lesbiana.
Incluso me señalo a las mujeres y me preguntó si estaba excitada por ellas. Estoy segura que si me hubiera sentido atraída por las mujeres, él habría estado devastado. Sin embargo, en realidad me pregunto si él se hubiera unido en esto. Todo lo que puedo decir es que nuestra vida sexual y el matrimonio fue un desastre después de este juego de rol que se convirtió en una norma para nosotros. Un día después de despertar de una resaca terrible, le dije a mi marido que no era lesbiana, nunca era lesbiana y que no quería continuar con este peligroso juego que estábamos jugando.
Dijo que le mentí acerca de ser lesbiana y que no me gustó verlo a él vestido como una mujer y que él no lo haría de nuevo. Su grito me hizo sentir como si yo era la que tenía el problema. Por supuesto, yo no cause la ruptura en nuestro matrimonio, lo hizo él. Pero, de alguna manera lo hizo mi culpa porque yo no quería vivir con un marido travestis como lesbiana ! Hizo un puchero y no se vistió por un año, por lo menos en frente de mí. No estoy segura de lo que hizo en privado en uno de sus viajes de negocios.
Lo que es crítico con los travestis es que no toman la responsabilidad de su propio problema con su identidad de género. No es culpa de nadie que nacieran de esta manera y no hay nada malo en ser un travesti. Sin embargo, tienen que realizar su trabajo para entender mejor lo que son y cómo ven su travestismo adaptado en su vida con su esposa antes de que ella entre a su mundo travesti.
Mi matrimonio nunca se recuperó de esta "fase lesbiana" que pasamos. Los dos estábamos enojados. Me sentí abusada y él se sintió descuidado y mentido. Fue un PERDER - PERDER de los dos. Sé a ciencia cierta, que no soy lesbiana, pero siempre supe eso. No necesite del travestismo de mi ex marido para aclararme esto.
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