jueves, 6 de enero de 2011

El travestismo

 El travestismo es la conducta que conlleva a una persona a vestir ropas del sexo opuesto, tener una sensacion agradable al hacerlo.
Lamentablemente, hoy en dia, se desvirtua mucho el termino TRAVESTI, confundiendolo, por ejemplo, con las prostitutas que trabajan en la calle o aquellas personas que ejercen, con la ayuda de la ciencia, cirugias para adaptar su cuerpo al sexo "deseado" o toman un comportamiento cotidiano del sexo opuesto, tratando de mimetizarse con el mismo. E incluso, adoptan el nuevo rol sexual en la cama.
Estas conductas no son exactamente lo que la palabra o concepto TRAVESTI define. Se mezclan transexuales, transgenero, travestis, etc.
La mujer, de por si, en nuestras culturas, adoptaron una postura travesti, la cual pasa desapercibida, vistiendo ropas de hombre, tomando su rol social, etc. pero las mismas fueron siendo aceptadas por la sociedad en los ultimos años. Quien hubiera aceptado una mujer vistiendo pantalones y trabajando de taxista, por ejemplo, en los años 20 o 30? Apenas 3 decadas de los miles de años que tiene la humanidad.
Para el hombre es diferente, si bien la sociedad tambien cambio sus pautas de comportamiento esperado para el "macho", ahora podemos tomar roles laborales mas femeninos, encargarse mas de la casa, tareas domesticas, cuidados del bebe e hijos, etc. Todavia se espera de este un comportamiento mas rudo, mas activo y que "lleve los pantalones bien puestos".
La TRAVESTI, no reniega de esto ultimo, al contrario, lo hace y con gusto, pero eso no quita que prospere en su interior, por distintas razones, un afan de lucir ropa femenina en periodos de tiempo relativamente escasos a sus quehaceres cotidianos en su actividad.
Por consiguiente, la travesti es un hombre feliz de serlo y no reniega de si mismo. No tiene la idea de cambio de sexo, convertirse en mujer y menos operarse.
Hay gran confusión acerca del travestismo y similares. En ingles, es muy utilizada esta palabra: Crossdresser, algo así, como cross:tras y dress: vestido vestimenta.
Es similar a nuestra palabra o concepto "travesti", aunque en ingles queda bien claro este concepto, mientras que en español, la palabra "travesti" esta cargada de muchas connotaciones distintas.
Crossdresser es el uso de la Ropa del genero opuesto por excelencia, sin importar la inclinación sexual del individuo, generalmente, heterosexual, y en varias ocasiones, hombres casados.
Por la idiosincrasia de nuestra sociedad, el crossdresser, es el que mantiene sus gustos en absoluta reserva, mucho mas que el travesti (según el concepto social del mismo) y obviamente el transexual.
Son varios los juegos sexuales que le dan un poco de pimienta a las relaciones sexuales, dentro y fuera de la cama. Cada uno en su medida, para que los mismos no se conviertan en Parafilia.
La Parafilia, es la sintomatizacion abusiva de estos comportamientos, que traen problemas sociales, delictivos o simplemente psicológicos. Componentes que pueden desbordar en Parafilia: Fetichismo, exhibicionismo, sadismo, masoquismo, voyerismo, onanismo, etc.
Dichos componentes o agregados sexuales, son natos en todas las personas, distintamente en cada una. Veamos por ejemplo, al Sadomasoquismo: Si un hombre le ata ligeramente las manos o le tapa los ojos a su amada, podría tratarse de un juego erótico inofensivo que compone las distintas variedades a la hora de hacer el amor. En dicho caso, aunque la mujer pueda desatarse con solo separar las manos, no deja de ser un juego, donde de común acuerdo toman roles masoquistas una y sádicos el otro. Pero sabemos bien, que un hombre que Viola a una mujer en la calle, tiene un componente SADICO en el hombre, sumamente intolerante y dañino, ya que lo comporta contra el desacuerdo de otra persona y por ende, en un terrible delito.
Otro ejemplo, entre muchos, es el exhibicionismo. Podemos ver a una pareja, besándose y tocándose en forma mas que cariñosa en una disco, cuando lo podrían hacer en la casa de alguno o en un hotel, pero en dicho caso, perdería el gustito de ser mirados por decenas personas que pululan por la disco permitiendo el exhibicionismo. A contraposición de lo descripto, si un hombre, sale a la calle semidesnudo y se muestra violentamente contra una mujer o una niña, pasa a involucrar a un tercero/a en sus "gustitos" provocando, quizás daños irreparables en esta ultima. Por consiguiente, es un delito, sus "gustitos" se pasaron de la raya afectando a una persona ajena.
Voyerismo: A quien no le gusta mirar ? Deleitarse mirando la silueta de una bella mujer. Componente que alimenta nuestras fantasías eróticas a la hora de hacer el amor. El problema esta, en cuanto se limita la acción a solo mirar como objeto de goce y satisfacción, provocando problemas sociales y psicológicos en la persona, a la que le cuesta interelacionarse con otra. Difícilmente encontremos en la extremidad de este comportamiento un delito, pero si graves problemas personales en la persona afectada, como por ejemplo: la soledad.
Fetichismo.Un componente muy fuerte en el travesti, es su fetichismo. Es la depositacion en un objeto u objetos de un alto contenido erótico. Como en los ejemplos narrados arriba, la depositacion erótica en algún objeto, puede ser simplemente la solicitud a su amada que vista determinada ropa que lo "enciende", la utilización de zapatos de taco alto u otro objeto ligado a lo femenino, masculino o un "algo" ligado a lo genérico. De mas esta decir, que este comportamiento, esta mas que aceptado por la sociedad, siendo la minifalda, medias con porta ligas, objetos femeninos fetichistas (mas comunes) para el hombre y la mujer, por su parte, deposita componentes eróticos en el ropaje masculino o parte del cuerpo en el hombre.
El travestismo y el fetichismo van fuertemente ligados. Este deposita en las ropas femeninas un alto contenido erótico, que ya exagerado, lo induce a querer usar dichos fetiches por el mismo. Este comportamiento, sumamente intimo en la mayoría de los casos, no trae aparejado delito alguno, ya que no es dañino para nadie, por inofensivo y por limitarse, justamente a la intimidad.
Si puede ocasionar trastornos emocionales en su propia persona, sentimientos de culpa, vergüenza, etc. Y en los muchisimos casos de travestis casados o en pareja, pueden impactar fuertemente sobre sus mujeres, las cuales pueden reaccionar con fuerte shock tras enterarse que sus maridos, sus hombres, tienen este extraño comportamiento. para lo cual, no están preparadas, por la educación recibida y el standard socio-cultural donde conviven.
Las mujeres son depositarias en el hombre, sus hombres, distintos componentes masculinos socialmente dictaminados que constratan fuertemente con la imagen o fantasías de un hombre luciendo una falda, vestido u otro componente netamente femenino. La imagen de un hombre vestido de mujer, las relaciona con la falta de hombría, la homosexualidad, la pasividad y debilidad. Estos dos últimos elementos, considerados del mundo netamente femenino. la mujer se siente frustrada y venida a menos en cuanto se enteran que sus maridos visten sus propios vestidos.
El hombre trasvestista, paradójicamente, cuando viste de hombre, no es amanerado ni afeminado. Conlleva su rol activo, masculino y esta orgulloso de el. Exteriorizando sus componentes femeninos únicamente en el momento de la practica trasvestista.
Porque un hombre se viste de mujer?
Si bien en cada caso, operan motivos individuales a la psicología de cada travestista, podemos entender, el trasvestismo como un termino sociológico y encontrar una respuesta global a este tema.
Manejándome mas por mis experiencias como travestista, puedo afirmar que en el ropaje femenino, el hombre encuentra la imagen de la madre, recurriendo a su memoria infantil, la madre lo nutria de amor y los elementos esenciales para la vida. Le daba seguridad, comprensión, entendimiento y armonía (sobre todo cuando estaba en la panza materna). Este puede ser bien, unos de los primeros rasgos del travestista, encontrar la protección materna en el uso de la ropa femenina.
El travestista heterosexual encuentra en la mujer el objeto de su deseo y hace un desplazamiento a su ropa, cargando a estos elementos con alto contenido erótico fetichista en su anhelo por poseer a la mujer. La admiración por ella y el deseo desplazado, convierten a su vestimenta en el objeto deseado.
Si bien muchos travestis se limitan a usar solo ropa interior femenina, la falda pasa a tener un protagonismo esencial en la vida de una travesti.
La ropa interior de ambos sexos, cada vez se parecen mas, y como su nombre lo dice, son ropajes interiores. Lo que el travesti busca, es la exteriorización de ese sentimiento y necesidad de travestirse, en la mayoría de los casos, en la intimidad.
Es por eso, que la pollera (pollera es sinónimo de falda) pasa a tener un valor agregado muy especial. Para empezar, la pollera te envuelve y te cubre, te protege. Siendo una prenda de uso exterior, es indudablemente femenina y con altísimo contenido erótico, incluso para los hombres no travestis y las mujeres mismas.
Es Realmente inofensiva la actividad travestista ?
No, no lo es. En absoluto. Pero no es ofensiva para terceros, solo se ven afectados el propio travesti y su entorno, lo sepa o no.
Es casi imposible imaginarse a un travesti haciendo daño a un tercero, pero pude hacerlo sin querer, cuando, por ejemplo, le informa a su mujer u otro familiar sobre su condición, y esta tiene un shock emocional. Mas allá si este shock emocional esta justificado o no, estas paginas, como tantas otras y muchos libros escritos sobre el tema, tratan de traer a la pareja cierta tranquilidad sobre el tema.
El hecho de que la mujer de un travestista, no sepa la realidad de su marido, también puede resultar afectada por su condición, ya que el marido puede sentir la falta de confianza en su pareja para compartir una sensación muy fuerte que lleva adentro. Provocando consciente o inconscientemente, tirantez en la pareja, indiferencia, etc.
Aunque el verdadero daño, va por dentro. El travesti sufre y no es victimario en el otro por ser tal, sino que el mismo es la víctima. La no posibilidad de encausar correctamente el travestismo, puede ocasionar trastornos en el dormir, comer e ínter-relacionarse con su propia mujer y con terceros. El amor, cariño y dulzura que conviven con el travesti, pueden convertirse en bronca, rabia, indiferencia, etc. Todo esto, lo sufre el travestista en su interior y por ende, su pareja o núcleo cercano.

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